A través de esta muestra retrospectiva se pretende demostrar
la capacidad de este Threatening Presence, 1976 182,9 x 457,2 cm © Motherwell, VEGAP, Barcelona, 1996 El conjunto de la obra de Motherwell muestra la alternancia entre dos
polos: la celebracion sensual de la existencia y la reflexión melancólica
sobre la condición humana. Como artista, Motherwell persigue ambos
estados de ánimo con pasión. Se puede pensar en su obra en
términos de "temas" o, quizá mejor, en términos
de "estados de ánimo". Él mismo decía: "al
final, todo tiene que salir de lo que te mueve". |
Dada la amplitud de sus intereses -en literatura, pintura, historia, filosofía-
no es sorprendente que haya tocado muchos temas, dando a cada uno la particular
entonación que requiere. Como muchos pintores, volverá repetidamente
sobre los mismos temas, enriqueciendo sus significados (Open paintings,
Elegías...). Se siente movido por grandes cuestiones: nacimiento, vida, amor, muerte. Pero dentro de estas grandes divisiones hay innumerables matices. En su trabajo a menudo adopta una nota de pensativa melancolía e incluso de terror existencial. No es sólo el terror al vacío, que le transmitio pronto la lectura de Mallarmé y aumentó con sus estudios sobre el psicoanálisis; hay también un íntimo registro de sus propios pensamientos negros, que él llamó monstruos. A veces la temida oscuridad y la creciente informidad de sus formas es violentamente perturbada y perturbante. A veces su estado de ánimo es menos turbulento, pero siempre inquietante. Salvajes y violentos o suaves y melancólicas, las obras de Motherwell revelan su carácter introspectivo y a menudo afligido. Dentro de la gran tradicion moderna, no desea excluir nada de su universo de cosas creadas y las cosas de este mundo están ahí, implícitas, en cada una de sus pinceladas. |